El regreso de las pesadillas
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El regreso de las pesadillas
El hombre se despertó de golpe, sudoroso, soltando un grito. Todavía podía sentir cómo las garras de esos seres se le clavaban tras ser perseguido en ese bosque siniestro, como de otro mundo. Ya había pasado por ello tiempo atrás, en Rostow, cuando hubo esa oleada de pesadillas que, de súbito, desaparecieron. Las pesadillas de entonces era inquietantemente similares a las actuales. Y ya entonces muchos temían dormir, pues las pesadillas les seguían noche tras noche impidiéndoles conciliar el sueño.
Pero no sólo él: todos los habitantes de Albor estaban sufriendo las pesadillas, y no una, ni dos, si no muchas veces; la vida en Albor, ya difícil de por sí, estaba complicándose aún más por este suceso. No pocos increparon a los brujos exigiendo una solución, y ellos, impotentes, pedían más tiempo para llevar a cabo sus investigaciones. Algunos intentaban tranquilizar los ánimos, recordando que en Rostow las pesadillas terminaron de golpe, y era de esperar que ahora ocurriera igual.
Llegaban noticias de que esta epidemia de pesadillas no sólo estaba afectando a los habitantes de Albor, si no que en Rostow se sufría el mismo mal; rumores apuntaban a que El Culto estaba advirtiendo de que la pesadillas eran un castigo de los dioses y que la única solución era rezar y pedir su perdón. Y que todos los que habían abandonado El Culto, debían regresar y resguardarse bajo su abrigo.
Pero no sólo él: todos los habitantes de Albor estaban sufriendo las pesadillas, y no una, ni dos, si no muchas veces; la vida en Albor, ya difícil de por sí, estaba complicándose aún más por este suceso. No pocos increparon a los brujos exigiendo una solución, y ellos, impotentes, pedían más tiempo para llevar a cabo sus investigaciones. Algunos intentaban tranquilizar los ánimos, recordando que en Rostow las pesadillas terminaron de golpe, y era de esperar que ahora ocurriera igual.
Llegaban noticias de que esta epidemia de pesadillas no sólo estaba afectando a los habitantes de Albor, si no que en Rostow se sufría el mismo mal; rumores apuntaban a que El Culto estaba advirtiendo de que la pesadillas eran un castigo de los dioses y que la única solución era rezar y pedir su perdón. Y que todos los que habían abandonado El Culto, debían regresar y resguardarse bajo su abrigo.
Última edición por Staff el Lun Mayo 23, 2011 7:48 pm, editado 1 vez
Re: El regreso de las pesadillas
*ves un cartel colgado en la plaza*
Los brujos estamos investigando el caso de las pesadillas, y reuniendo todos nuestros esfuerzos en sacar resultados concluyentes de los estudios.
Hacemos un llamamiento a la calma y recordamos que los males producidos en los sueños, son solo pesadillas, que luego en el mundo real no tienen repercusiones.
Para aquellas personas que sufran la pesadilla:
1. Mantener la calma y ser conscientes de lo que nos está sucediendo. Si vemos el bosque de árboles morados, repleto de hadas, es que estamos en el sueño.
2. Observar con todo detalle lo que está a nuestro alrededor, sin tratar de que nada se nos pase por alto. Cualquier información puede ser crucial para la investigación.
También es importante observar cómo nos encontramos nosotros mismos. Qué llevamos vestidos, que tenemos en la mochila, si mantenemos nuestras facultades y habilidades.
3. Realizar alguna marca en el sueño. Algo claramente visible, como arrojar un objeto, atar una venda a un arbol... no dejar objetos perecederos como antorchas encendidas.
4. Seguir el curso del sueño, sin perder detalle de lo que sucede. No preocuparse por ser atacado por criaturas extráñas, es una de las formas de despertar, y recordar en todo momento, que nos despertaremos sin un rasguño.
5. Acudir a un brujo para informar de lo sucedido. En qué lugar nos encontrábamos antes de tener el sueño. Realizando qué actividad. Que sensación tuvimos antes de tener la pesadilla. Donde nos encontrabamos en el sueño. Qué marca visible hemos dejado. Todo lo que hemos visto en el sueño, y cómo nos hemos despertado.
Insisto en que es importante mantener la calma, en el propio sueño como en la realidad, sabiendo que es solo una pesadilla y que los males que nos afecten en el sueño solo servirán para despertarnos.
*Brujo Umer*
Los brujos estamos investigando el caso de las pesadillas, y reuniendo todos nuestros esfuerzos en sacar resultados concluyentes de los estudios.
Hacemos un llamamiento a la calma y recordamos que los males producidos en los sueños, son solo pesadillas, que luego en el mundo real no tienen repercusiones.
Para aquellas personas que sufran la pesadilla:
1. Mantener la calma y ser conscientes de lo que nos está sucediendo. Si vemos el bosque de árboles morados, repleto de hadas, es que estamos en el sueño.
2. Observar con todo detalle lo que está a nuestro alrededor, sin tratar de que nada se nos pase por alto. Cualquier información puede ser crucial para la investigación.
También es importante observar cómo nos encontramos nosotros mismos. Qué llevamos vestidos, que tenemos en la mochila, si mantenemos nuestras facultades y habilidades.
3. Realizar alguna marca en el sueño. Algo claramente visible, como arrojar un objeto, atar una venda a un arbol... no dejar objetos perecederos como antorchas encendidas.
4. Seguir el curso del sueño, sin perder detalle de lo que sucede. No preocuparse por ser atacado por criaturas extráñas, es una de las formas de despertar, y recordar en todo momento, que nos despertaremos sin un rasguño.
5. Acudir a un brujo para informar de lo sucedido. En qué lugar nos encontrábamos antes de tener el sueño. Realizando qué actividad. Que sensación tuvimos antes de tener la pesadilla. Donde nos encontrabamos en el sueño. Qué marca visible hemos dejado. Todo lo que hemos visto en el sueño, y cómo nos hemos despertado.
Insisto en que es importante mantener la calma, en el propio sueño como en la realidad, sabiendo que es solo una pesadilla y que los males que nos afecten en el sueño solo servirán para despertarnos.
*Brujo Umer*
Ithidiel- Cantidad de envíos : 57
Fecha de inscripción : 08/03/2010
Re: El regreso de las pesadillas
Las pesadillas seguían, noche tras noche: el mismo lugar, las mismas criaturas, el mismo pánico... Muchos ya sentían miedo de echarse en la cama, sabedores de que volverían a ese sitio, a ser nuevamente perseguidos y muertos.
Anwas era uno de ellos. El granjero llegado a Albor en busca de un nuevo hogar había sido uno de los primeros en sufrir las pesadillas y todas las noches, casi sin excepción, se repetía ese mismo sueño. Y esta noche, tras horas de revolverse en la cama, sudando, con el pavor impidiéndole conciliar el sueño, de quedó, finalmente, dormido. Otra vez: el bosque de colores oscuros, sombrío: las figuras movíendose entre los árboles, la sombra saliendo de entre la maleza, los mordiscos, los gritos, el insportable dolor...
Anwas se despertó gritando de terror. Tardó varios minutos en tranquilizarse... volvía a sentir su cuerpo, sentía el frío del aire rozando su sudoroso cuerpo. Respiró hondo, se relajó, se palpó el brazo. Sintió algo cálido. Bajó la mirada hasta encontrar una herida cubierta de sangre, una herida reciente, como de un garrazo. Presa del pánico, se levantó de la cama y se quitó la ropa mientras apenas era incapaz de mantener el control. La pierna, el hombro, el pecho: la sangre le brotaba de diferentes y heridas, en algunos casos rasguños, en otros más profundas. Salió corriendo desesperado en busca del cualquier ayuda que pudiera encontrar.
Él fue uno de los primeros, pero no el único; varios más se despertaron con las heridas que habían sufrido durante sus sueños. Y eran reales.
Rumores apuntaban a que en Rostow estaba ocurriendo exactamente lo mismo, y todos quienes se acercaban escuchaban los cánticos de los fieles, acólitos y sacerdotes de El Culto rogando por el perdón de los dioses.
Off-rol: Llegados a este punto TODOS los personajes de Etrania sufren pesadillas con cierta regularidad. Así que, si vuestro personaje no ha ido personalmente allí dentro del propio juego, a través de estos relatos esperamos que os hagáis una idea de por lo que puede estar pasando.
Anwas era uno de ellos. El granjero llegado a Albor en busca de un nuevo hogar había sido uno de los primeros en sufrir las pesadillas y todas las noches, casi sin excepción, se repetía ese mismo sueño. Y esta noche, tras horas de revolverse en la cama, sudando, con el pavor impidiéndole conciliar el sueño, de quedó, finalmente, dormido. Otra vez: el bosque de colores oscuros, sombrío: las figuras movíendose entre los árboles, la sombra saliendo de entre la maleza, los mordiscos, los gritos, el insportable dolor...
Anwas se despertó gritando de terror. Tardó varios minutos en tranquilizarse... volvía a sentir su cuerpo, sentía el frío del aire rozando su sudoroso cuerpo. Respiró hondo, se relajó, se palpó el brazo. Sintió algo cálido. Bajó la mirada hasta encontrar una herida cubierta de sangre, una herida reciente, como de un garrazo. Presa del pánico, se levantó de la cama y se quitó la ropa mientras apenas era incapaz de mantener el control. La pierna, el hombro, el pecho: la sangre le brotaba de diferentes y heridas, en algunos casos rasguños, en otros más profundas. Salió corriendo desesperado en busca del cualquier ayuda que pudiera encontrar.
Él fue uno de los primeros, pero no el único; varios más se despertaron con las heridas que habían sufrido durante sus sueños. Y eran reales.
Rumores apuntaban a que en Rostow estaba ocurriendo exactamente lo mismo, y todos quienes se acercaban escuchaban los cánticos de los fieles, acólitos y sacerdotes de El Culto rogando por el perdón de los dioses.
Off-rol: Llegados a este punto TODOS los personajes de Etrania sufren pesadillas con cierta regularidad. Así que, si vuestro personaje no ha ido personalmente allí dentro del propio juego, a través de estos relatos esperamos que os hagáis una idea de por lo que puede estar pasando.
Re: El regreso de las pesadillas
El brujo Kurt discutió largo y tendido con el brujo Filomeo. Era difícil atravesar la dura mollera del veterano brujo, pero al final aceptó, no de muy buen grado, aquello que le explicaba Kurt. Cada vez la población estaba más desesperada y sin saber qué hacer... las pesadillas eran más fuertes y más personas se encontraban con heridas al despertarse. Era una situación crítica, sin duda la más grave desde la Plaga. Por lo que sabía, al menos 2 personas se habían quitado la vida en Albor, y no daban abasto con sustancias que ayudaran a conciliar el sueño. En Rostow, si los rumores eran ciertos, la situación eran, incluso, peor. Y todo apuntaba a que las pesadillas podían empeorar.
Llegó a la posada con un cartel que pegó en el lugar más vistoso que pudo.
Se convoca a todos los habitantes de Albor el [domingo 29] a las [21:00 horas] en el templo de Manat para discutir aspectos de fundamental importancia referentes a las pesadillas. Dados los terribles sucesos que estamos viviendo, se ruega a todos que hagan un esfuerzo por presentarse.
Fdo. Brujo Kurt y Brujo Filomeo, del Gremio de Brujería
Llegó a la posada con un cartel que pegó en el lugar más vistoso que pudo.
Se convoca a todos los habitantes de Albor el [domingo 29] a las [21:00 horas] en el templo de Manat para discutir aspectos de fundamental importancia referentes a las pesadillas. Dados los terribles sucesos que estamos viviendo, se ruega a todos que hagan un esfuerzo por presentarse.
Fdo. Brujo Kurt y Brujo Filomeo, del Gremio de Brujería
Re: El regreso de las pesadillas
El brujo Filomeo no estaba contento, NADA contento. Los días pasaban y no veía ningún avance ni mejora en las pesadillas. Había dado a Kurt un margen de confianza que había sobrepasado. Pegó el siguiente cartel en la posada:
El próximo [domingo 24] a las [21:30 horas] se convoca a todos los habitantes de Albor en el templo de Manat para discutir realmente cómo solucionar las pesadillas y cómo todos podemos colaborar. Es hora de dejar de pensar en dioses y profecías y entender que de sólo nosotros depende solucionar esto.
Fdo. Brujo Filomeo
El próximo [domingo 24] a las [21:30 horas] se convoca a todos los habitantes de Albor en el templo de Manat para discutir realmente cómo solucionar las pesadillas y cómo todos podemos colaborar. Es hora de dejar de pensar en dioses y profecías y entender que de sólo nosotros depende solucionar esto.
Fdo. Brujo Filomeo
Re: El regreso de las pesadillas
Pocos acudieron a la llamada de Filomeo. El brujo, aun así, explicó con contundencia a los presentes la estupidez de fiarse de un profeta y sus profecías, y cómo las indicaciones de Kurt no estaban sirviendo para nada. Lo crucial era, insistía, construir la torre de brujería de una vez, para poder hacer unas investigaciones adecuadas por el método tradicional. Algunos de los presentes estaban algo disgustados con el tono de Filomeo y la reunión parecía que no iba a conducir a ninguna parte cuando, de repente, por la puerta apareció Dun, el chico pálido que algunos tenían por profeta. Parecía absorto, en una especia de trance. Haciendo caso omiso a los comentarios de Filomeo, se acercó a la estatua de Manat, la Dama de Plata, e hincó la rodilla frente a ella; Filomeo creyó ver que el chico, con ese movimiento, pulsaba un pequeño botón que se encontraba en la base de la estatua.
Todos oyeron un "clic".
Todos oyeron un "clic".
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